#GraphosCc #Tlx #Noticias | Las Pinturas Rupestres de Santa María Atlihuetzia- Amaxac de Guerrero. Por Guillermo Alberto Xelhuantzi Ramírez
Uno de los vestigios más antiguos de la presencia del hombre en lo que hoy es el estado de Tlaxcala, fueron las pinturas rupestres, localizadas en un abrigo rocoso situado en los límites de las comunidades de Santa María Atlihuetzia y Amaxac de Guerrero. Datadas hacia 6, 000 años a.n.e, las pinturas rupestres eran testimonio de la presencia de los primeros grupos cazadores recolectores en la región.
El principal grupo de pinturas se localizaba en las rocas salientes de la llamada Cueva del Diablo, en donde, según la leyenda, se aparecía el Diablo y para evitar la presencia de este ser maligno, un grupo de vecinos coloco en el acantilado una cruz de fierro.
Recién se descubrieron las pinturas, el Centro Regional INAH Tlaxcala realizo excavaciones arqueológica al interior de la cueva y dado su cercanía con las cascadas se acondicionó el sitio para la visita de turistas, incluso se creó un andador con miradores y módulos explicativos sobre el significado de las pinturas, desafortunadamente en la actualidad las pinturas han desaparecido pues se han despedido varias rocas del abrigo que en la actualidad han cerrado la Cueva.
Varios factores fueron la causa de su destrucción, el primero se debió a factores naturales, ya que al estar las pinturas en un abrigo rocoso están proclives a un derrumbe, no obstante, el vandalismo que se generó en la zona, la falta de promoción del sitio por parte de las autoridades municipales y el desinterés de los habitantes tanto de Santa María Atlihuetzia como de Amaxac de Guerrero por proteger su patrimonio histórico, así como el conflicto entre particulares y comunidades por los terrenos adyacentes al abrigo rocoso provocó el olvido de estos importantes vestigios arqueológicos.
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